Cada tres años deberíamos hacer una revisión de nuestro rumbo y enfoque para replantear lo que sea necesario con el objetivo de adivinar frutos en la vida. Como pastor de la iglesia, he recibido la instrucción del Señor de trabajar en ciclos de tres abriles y me 1Se le anima a alcanzar lo mejor de sí en cada día, trabajando con voluntad y co